Comunicados
Hermosillo, Sonora, a 9 de febrero de 2024
PRONUNCIAMIENTO
Ante la violencia exacerbada en las zonas de trabajo agrícola en México Las organizaciones, redes, personas defensoras de derechos humanos y de la academia, emitimos el presente Pronunciamiento ante los distintos hechos violentos que se han suscitado en el estado de Sonora, externamos nuestra consternación y preocupación por la violencia que recorre distintos territorios de nuestro país, la cual ha desembocado en una inseguridad pública desbordada sobre todo para el caso de los homicidios de alto impacto. Las lacerantes violencias en general, pero en particular la homicida, feminicida, juvenicida e infanticida se entrecruzan con actividades ilícitas para producir escenarios desoladores. Aunque las violencias y opresiones nos llega a todas y todos, los grupos sociales como jornaleros/as agrícolas, los/as/ asalariados/as urbanos, los/as migrantes internos e internacionales, pueblos originarios y afromexicanos provenientes del sur y centro del país, las personas en condición de calle, entre otras, se encuentran en mayor exposición ante dichas amenazas.
El pasado domingo 4 de febrero, un grupo de trabajadores/as agrícolas, migrantes y asentados en la Costa de Caborca, Sonora, fueron objeto de una serie de agresiones directas con arma de fuego; los asesinatos corresponden a tres personas, una mujer y dos adolescentes, y siete heridos. 1 La mujer de 30 años y los adolescentes de tan solo 15, son reflejo de la dinámica incesante de las violencias estructurales como la desigualdad, la pobreza, etc y de las violencias directas como las privaciones a la vida, a la libertad y a la seguridad personal y comunitaria en los distintos territorios, especialmente en las zonas agrícolas. En otro hecho violento, el 20 de enero de este 2024, en la carretera estatal que cruza la zona agrícola de la Costa de Hermosillo, familias de la zona vivieron el fuego cruzado entre cuerpos de seguridad pública y delincuencia organizada.2 Situaciones como las anteriores se expresan en distintos puntos geográficos del país, con especial preocupación las vemos en las zonas campesinas y agrícolas, tanto del sur como en las regiones de la agroindustria mexicana.
Ciudad de México, a 29 de noviembre de 2021
COMUNICADO
RENUEVA LA ALIANZA CAMPO JUSTO EXIGENCIA DE AUMENTAR EL SALARIO MÍNIMO PROFESIONAL DIGNO PARA LAS PERSONAS JORNALERAS AGRÍCOLAS EN MÉXICO
- Exige a CONASAMI un salario mínimo de $300 pesos para las y los trabajadores del campo.
- Deben garantizarse condiciones dignas para la labor de millones de personas jornaleras
Mientras que en Estados Unidos una persona jornalera agrícola percibe aproximadamente 300 pesos por hora, en México nuestra exigencia de un salario mínimo de 300 pesos por día está lejos de cumplirse, frente a un sector patronal que califica cualquier avance de “irracional”. La falta de compromiso de los sectores de gobierno y patronal es inaceptable y reflejo de la precariedad que vivimos aquí.
La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CONASAMI) comenzará las discusiones anuales sobre salarios mínimos, a partir del próximo 25 de noviembre, esta será la oportunidad para establecer el nuevo salario mínimo para personas jornaleras agrícolas, luego de que éste fuera fijado por primera vez en la Ley Federal del Trabajo en diciembre de 2019.
Ciudad de México, a 10 de marzo del 2021
PRONUNCIAMIENTO
La Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas exhorta a las autoridades de Salud, Migración, Bienestar Social y el INPI a garantizar el Derecho de acceso a la vacunación contra la COVID-19 de la población jornalera agrícola en México.
Las y los integrantes de la Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas (REJJA), que tiene presencia en los estados de: Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Ciudad de México, Morelos, San Luis Potosí, Guanajuato, Sinaloa y Sonora, en conocimiento de que la Política Nacional de Vacunación contempla ejes de priorización para la vacunación contra el virus SARS-CoV-2 en México, y precisa que “la vacunación de personas adultas mayores tendrá un enfoque primario de mayor vulnerabilidad territorial, por lo que iniciará con la población que reside en zonas rurales dispersas y progresivamente continuará hasta llegar a áreas metropolitanas”, hacemos un llamado a contemplar e integrar a la población jornalera agrícola migrante y asentada como una población prioritaria, principalmente las y los adultos mayores que migran ya sea para trabajar en los campos agrícolas, o bien como acompañantes de sus familiares, de igual forma aquellas personas que se encuentran asentadas en estados de destino.
Alianza Campo Justo llama al Gobierno Federal a reconocer la labor de las personas jornaleras y a fijar un salario mínimo digno
- Estamos frente a la oportunidad de saldar la deuda histórica del gobierno de México con las personas jornaleras.
- Fijar un salario mínimo profesional para las personas jornaleras es el primer paso para revertir las condiciones de desigualdades en que se encuentran.
- La Alianza Campo impulsará el reconocimiento y respeto de los derechos de las y los jornaleros en México.
México, 21 de octubre de 2020.- En México cerca de 3 millones de personas trabajan en el campo, de las cuales, 99% viven en condiciones de pobreza, marginación y desigualdad social y económica a causa de su bajo nivel de ingreso, lo que resulta insuficiente para cubrir sus necesidades básicas en salud, educación, condiciones laborales, vivienda y seguridad social.
El trabajo agrícola es por naturaleza físicamente demandante, ya que implica largas jornadas laborales en las que las personas trabajadoras del campo están de pie por largos periodos de tiempo. Además, los riesgos de accidentes aumentan con la fatiga, el terreno difícil en los que laboran las personas jornaleras, así como por la exposición a plaguicidas y la falta de acceso a servicios de salud básica. Aunado a esto, la mayoría de las y los jornaleros trabajan de manera temporal, sin contrato, y por estaciones, lo que conlleva a una constante movilidad y migración entre estados, generalmente de familias enteras. Además de asentamientos de población jornalera locales en diferentes entidades. En los trabajos del campo, también hay un importante número de niñas, niños y adolescentes, así como mujeres y mujeres jóvenes con menores de edad. Desafortunadamente, existe un importante rezago en información, ya que la última Encuesta Nacional de Jornaleros Agrícolas (ENJO 2009) fue realizada hace más de diez años, por lo que los datos existentes son insuficientes, inexactos y desactualizados.
COMUNICADO DE PRENSA
León, Guanajuato a 14 de septiembre de 2020
Boletín de Prensa para dar a conocer el proyecto
Campamentos Na’ valí: atención a infancias indígenas en contexto de migración
- En su séptima edición na’ valí atendió un total de 535 niñas, niños y adolescentes.
- El proyecto incorporó a un médico para el seguimiento a casos de salud.
Año con año arriban al estado de Guanajuato familias indígenas que provienen en su mayoría de los estados del sur de México (Guerrero y Oaxaca) para emplearse como jornaleras agrícolas en varios municipios: Silao, Romita, San Francisco del Rincón, Dolores Hidalgo y León.
Las familias que arriban son originarias de municipios que se caracterizan por sus altos índices de pobreza y marginación, con pocas opciones para emplearse en sus lugares de origen, lo que sienta las bases para la migración interna que se desarrolla en contextos de desplazamiento y migración forzada.
En 2014 el Centro de Desarrollo Indígena Loyola, A.C1., a través del programa Jornaleros/as Agrícolas Indígenas Migrantes (JAIM) sentó las bases para acompañar a la población indígena que arriban al municipio, enfocando su trabajo en la atención de las infancias, así nacen los Campamentos na’ valí,2 proyecto cuyo objetivo inmediato era reducir los decesos infantiles ocasionados por accidentes en los campos agrícolas y atender de manera emergente los problemas de salud que presentaban las infancias por enfermedades que eran y son asociadas a las condiciones de pobreza y marginación en las que viven y migran.
COMUNICADO DE PRENSA
Sonora, México, a 5 de junio de 2020
El Grupo de Trabajo Jornaleros Agrícolas en Sonora (GT-JAS) y las organizaciones firmantes, hacen un llamado URGENTE a fin de atender las localidades agrícolas y con presencia de población jornalera migrante y asentada en el estado de Sonora, México, frente a la COVID-19
La población jornalera agrícola y su atención debe ser considerada como de la más alta prioridad nacional, dado que representan a la población que alimenta al país.
En México se han confirmado al 5 de junio 105,680 mil casos y 12,545 defunciones por COVID-19, mientras que para Sonora suman 3042 con 255 defunciones, según datos oficiales*. La entidad está ubicada en el color rojo del semáforo nacional de riesgo por COVID, es decir, en alerta. Con preocupación hemos observado que la situación sanitaria en distintas zonas agrícolas del estado de Sonora, así como otras regiones del país, empieza a agudizarse debido a varios factores, dos de ellos cruciales. Primero, las capacidades institucionales se ven menguadas ante la ya inminente transmisión comunitaria en las principales localidades agrícolas del país, de entre las cuales sobresale la comisaría Miguel Alemán, en la Costa de Hermosillo. En este llamado ponemos atención en esta última. Según las fuentes consultadas hasta el día 1 de junio, se registraron 11 defunciones probables por COVID-19, 2 en campos agrícolas y 9 de la localidad de Miguel Alemán. Segundo, los servicios de salud públicos resultan por demás insuficientes en recursos humanos y materiales ante el ascenso en la transmisión comunitaria. Los esfuerzos de las autoridades municipales requieren un apoyo extraordinario por la contingencia, siendo necesario que las autoridades estatales y federales pongan atención a esta población que vive en condiciones de precariedad y marginación. Esto se recrudece ante la llegada por el ciclo agrícola, de población jornalera de otros estados de la república sin que se implementen protocolos de prevención y atención durante el traslado y a su llegada.
COMUNICADO DE PRENSA
Ciudad de México, a 13 de mayo de 2020
“En el contexto de la pandemia del COVID-19 en México, las personas jornaleras agrícolas y sus familias trabajan y continúan enfrentando violaciones a sus derechos humanos, laborales y de salud: muerte de niñas y niños en los campos agrícolas, nulidad de seguro social, albergues sin condiciones dignas o en abandono y la sobredemanda de mano de obra sin protección sanitaria”.
Frente a la pandemia de COVID19 el trabajo en el sector agrícola ha sido considerado una “actividad esencial”, por ello como Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas emitimos el 18 de marzo un pronunciamiento exhortando a las autoridades gubernamentales a abordar el tema de trabajo agrícola de manera integral; sin embargo, a dos meses después y ante las realidades detectadas es que las y los integrantes de la Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas, presentamos el documento que elaboramos, dirigido a las y los empresarios, a las autoridades competentes a nivel federal, estatal y municipal, a la sociedad civil en general y la academia, titulado “Recomendaciones prácticas dirigidas a personas que contratan, atienden y acompañan en diferentes niveles de intervención a las personas jornaleras agrícolas y sus familias en un contexto de crisis por pandemia en México”.